Trabajamos el nombre, la identidad y la gráfica ambiental, basándonos en los clásicos hacendados de familias numerosas. La tipografía, creada para la ocasión, es una interpretación contemporánea de lo que pensamos hoy en día como las letras de la época colonial grabadas en madera.
Para personificar la marca, creamos a “Don Belisario”, un hacendado que impone respeto, y a toda su familia, una serie de personajes aristocráticos que presiden todas las comidas en el restaurante.